30 Sep Los peligros de los Certificados Energéticos LOW COST
Existe una gran tendencia a reducir los precios en cualquier mercado, y en nuestro sector no íbamos a ser menos, sin embargo, hay un servicio que por normativa se ha hecho necesario de manera reciente relacionado con la certificación energética. En este artículo, vamos a tratar de exponer las pautas a tener en cuenta a la hora de contratar este trabajo y evitar así los peligros de los Certificados Energéticos LOW COST.
Si vas a vender o alquilar una vivienda, local, nave, etc., sabrás que según el RD 235/2013, has de proporcionar al posible comprador o inquilino, el correspondiente Certificado Energético del inmueble. En este certificado energético, entre otras valoraciones, se establece los consumos energéticos que el inmueble está destinado a tener con las condiciones técnicas en las que se encuentra: tipo de paredes, ventanas, sistemas de generación de calor y agua caliente, etc.
Últimamente, nos estamos encontrando con casos de clientes que dicen tener una mejor propuesta económica para elaborar estos certificados energéticos, y para evitaros problemas a futuro, os queremos dar unas recomendaciones a la hora de solicitar la elaboración del certificado energético, evitando así, que caigáis en los peligros de los certificados energéticos LOW COST.
1.- Ha de saber que la empresa o el técnico que realice el certificado, ha de ser un Ingeniero Técnico, Ingeniero, Arquitecto o Aparejador. Cualquier otro profesional, NO ESTÁ HABILITADO PARA FIRMARLO y por lo tanto, no será válido.
2.- Para elaborar el certificado energético, es necesario la elaboración del plano del inmueble y la realización de una toma de datos amplia, así que desconfíe de aquellas empresas o personas que quieran realizar el certificado sin ni siquiera presentarse en el inmueble.
3.- Al hilo del punto anterior, el certificado energético no se lo puede realizar usted mismo ni tampoco le pueden garantizar obtener una calificación determinada, ya que, el resultado depende de los datos y características técnicas constructivas que el inmueble tiene, y se podrá mejorar la calificación energética en función de las medidas correctoras que obligatoriamente ha de proponer y valorar económicamente la empresa o técnico que elabora el certificado energético.
4.- Compruebe que finalmente el certificado tiene los datos del emisor del mismo, y si es preciso, pídale su acreditación para verificar su autenticidad.
Aunque estas premisas parecen lógicas y de sentido común, y aunque a priori parezca que la pérdida económica por realizar un certificado energético de mala calidad o inválido para ser presentado ante Organismos Oficiales sea mínima, el contenido del Certificado Energético va más allá de que la obtención de un papel más, o una letra de la categoría energética del inmueble. El Certificado Energético, está indicando que nuestro inmueble cumple con unas condiciones técnicas que hacen que tenga un consumo determinado, y si no se realiza de manera correcta, con una buena toma de datos y con una elaboración en detalle, podemos incurrir en obtener una calificación que luego, dista mucho de la realidad y por lo tanto, el comprador o inquilino del inmueble ha podido tomar la decisión de manera incorrecta motivado por este documento.
Pongamos un ejemplo:
Marcos, acaba de heredar un piso que ha decidido reformar para alquilarlo y ajeno a los peligros de los Certificados Energéticos LOW COST, encuentra por internet una empresa que le cobra muy poco por emitir el documento necesario para proceder con el alquiler.
Le piden documentación como la dirección exacta del inmueble, la ficha catastral, unas fotos del interior y del exterior, y si es posible, que le envíen documentación de los equipos de aire acondicionado si lo tiene, la cual, tendrá que enviar por correo electrónico y ni siquiera un técnico se tendrá que personarse en la vivienda, porque así no le molestan en su día a día.
Pues bien, previo pago del Certificado Energético realizado en unas milagrosas 24-48 horas, orgulloso muestra que su piso tiene una calificación energética de tipo C, no está nada mal al tratarse de un piso antiguo y con una reforma mínima para que se pudiera alquilar bien, piensa Marcos y decide colgarlo en un portal de alquiler de inmuebles de internet.
Como la certificación ha sido buena y ha puesto una renta razonable pronto consigue alquilar el piso a un inquilino.
Al cabo de pocos meses, Marcos recibe una llamada del inquilino. Éste se ha informado correctamente y sorprendido le comunica que la vivienda está consumiendo más de lo que teóricamente desprende la calificación del tipo C de la vivienda, y además, ha consultado con su Abogada y le van a reclamar una importante cantidad económica por haber engañado en este tipo de documento, el cual, fue fundamental para la toma de la decisión.
Efectivamente, esto se trata únicamente de un caso ejemplo, pero es un ejemplo válido para plasmar los peligros de los Certificados Energéticos LOW COST, y de una vez más, como lo barato puede salir caro a la larga.
Cualquier duda que os quede al respecto, podéis consultarla en nuestra sección de Certificados Energéticos, o poneros en contacto a través de nuestra dirección:
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